lunes, 8 de septiembre de 2008

Incoherencia.


Hoy fuimos al cine, estrenaban "Che, el argentino". Nos dirigimos al cine hicimos cola i al llegar a la ventanilla nos comunican que están agotadas las entradas, seguidamente nos dirigimos a otro cercano que también hacían la misma película.
El éxito ya nos pareció bien ¡no todo esta perdido! Doy por entendido que el hecho de interesarse por la vida del "Che" ya es positivo y dice mucho de las personas que acuden a verla. Una vez más me traiciona mi parte idealista y caigo en las redes de mi "subconsciente filantrópico".
Me explico:
Después de hacer cola entramos en el cine, íbamos Mª Angeles, la Jana, el Pau y yo, nos sentamos en la penúltima fila, cuatro asientos en el centro de la sala, detrás, la última fila compuesta por seis asientos, llegan dos parejas y se sientan acupando los centrales dejando uno libre en cada extremo. Al rato estaba la sala practicamente llena, se acerca una pareja y pide a los de atrás si por favor se pueden correr un asiento y de esta manera pueden sentarse juntos, después de pensar unos segundos y poniendo cara de circunstancias una de las chicas le argumenta.
-Es que, hemos elegido este asiento por su situación.
Diciendo esto dan por entendido que no se mueven, ha continuación mi hijo le dice a la pareja.
-Son extranjeros, no te habrán entendido.
-Sí, de sobras me entienden.
Realmente le entendieron pero no quisieron cambiar unos milímetros su punto de vista, quedándose los asientos libres... y yo por mi manera de ser un tanto iluso, con un malestar en el cuerpo...
¿ Quizás para algunas personas, como dice un compañero de trabajo, el "Che" tan solo represente una moda?.

No hay comentarios: